Por Javier Caso Iglesias | Analista Político y Activista Social
Le decía hoy a un compañero que en relación a PODEMOS entiendo que no es necesario que venga nadie de los activistas más conocidos de esta iniciativa a nuestras localidades a explicarnos qué es PODEMOS, pues PODEMOS se explica por sí mismo; es un proceso de empoderamiento de la ciudadanía de abajo a arriba. En el momento en que deje de ser esto habrá acabado como proyecto ilusionante para transformarse en un aparato más.
Las asambleas de PODEMOS que se están celebrando indican rotundamente esta dirección. Por tanto es poco representativo pretender querer reunirnos con alguien del "aparato" de PODEMOS cuando PODEMOS carece de "aparato". en PODEMOS todos/as son "uno entre iguales" y a las pruebas de las asambleas multitudinarias que se están organizando por todos los puntos de la geografía del estado me remito.
PODEMOS no es un aparato, es un movimiento popular. Ese es el error de muchos, que se piensa que PODEMOS es un aparato. PODEMOS es un movimiento asambleario a través del cual se está desarrollando un proceso de empoderamiento de la ciudadanía. Aquí no hay "chicos", ni nada por arriba. Es un proceso desde abajo.
La diferencia de PODEMOS con las viejas organizaciones de la izquierda es que estas se ha quedado en eso, unas siglas con mucho aparato y con muy poca gente detrás; se ha de ver esta evidencia en que la vieja izquierda se ha quedado en meros aparatos sin gente detrás que la respalde.
A las organizaciones de la vieja izquierda les falta masa crítica detrás. Y les falta masa crítica por el hecho de tratar siempre de organizar algo endogámico. Esta es la diferencia con PODEMOS, que PODEMOS no construye algo endogámico vinculado a fetiches de siglas, colores o banderas; sino un proceso de empoderamiento desde abajo que agrupa a muchas personas conscientes de lo que quieren. Iglesias, Errejón, Monedero, Urban, Camargo son unos entre iguales. Tan necesarios como prescindibles, ni más ni menos que como los demás.
Este proceso iniciado por PODEMOS ya no hay quien lo pare, ni sus primeros protagonistas y activistas serían capaces, a estas alturas, de detener el proceso; pues sus objetivos y metodología son muy claros y precisos y están especificados en su decálogo que reproduje en el siguiente artículo de opinión que escribí hace unos días (http://goo.gl/LVkVd0).
Las asambleas y reuniones de los Círculos PODEMOS están siempre hasta arriba de gente. Se organizan sin necesidad de la presencia de ningún activista de los que la prensa burguesa dicen que lideran este proceso. Cientos y cientos de personas empoderándose sin pedir el permiso de nadie. El poder en PODEMOS surge de abajo, de las asambleas.
En Extremadura está ocurriendo lo mismo. Como ejemplo decir que desde Podemos-Cáceres se pedían algunas orientaciones y sugerencias a Madrid y se le decía, como así consta en su facebook, que convocaran asamblea y que todos los pasos se decidieran desde abajo. Las asambleas en PODEMOS lo deciden todo, incluso si quieren que algún activista de otra localidad asista a alguna reunión, o presentación de la iniciativa. Si Pablo Iglesias, o Monedero, o Errejón intervienen en alguna asamblea es por el hecho de que la propia asamblea ha solicitado su presencia. Es la asamblea la que decide. Los activistas están al servicio del movimiento.
Decía un sabio pensador que nuestras ideas solo se harían realidad cuando arraiguen en las masas y eso es PODEMOS, lo que se observa en sus multitudinarias asambleas de cientos y cientos de personas. La que tuvo lugar en Valencia eran miles, al igual que la de Zaragoza. Esto es el poder del pueblo. Nuestra labor como activistas es tratar se acompañarlo para que sea lo más operativo posible.
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