jueves, 24 de enero de 2013

¿Es el federalismo incompatible con el derecho a decidir?

El artículo de Patxo Unzueta ¿No votar o votar no?, publicado en el diario El País el pasado día 22 de enero de 2013 (http://goo.gl/APaKx), ha generado un intenso debate sobre el derecho a decidir.

Desde mi punto de vista el derecho a decidir se ha de defender siempre. El derecho a decidir es irrenunciable para la ciudadanía.

Como les decía hace un par de días a mis compañeros de Construyendo LA IZQUIERDA (CLI) sobre la realidad política en Catalunya: "pienso que la tendencia hacia el independentismo se irá desactivando en el momento en que surja a nivel estatal un referente político de izquierdas consecuente con el federalismo que lo predique y que lo aplique cuando gobierne. En la actualidad el PSOE no encarna ese referente político, pues el PSOE es una opción socioliberal y juancarlista e IU-PCE es solo federal en sus escritos, en su práctica política es más centralista que UPyD. El proyecto republicano de IU-PCE es centralista y españolista hasta la médula. En la última asamblea de Izquierda Unida se ha visto esto a las claras en su modelo organizativo. A las federaciones de la propia organización se les ha cortado toda autonomía, cada día pintan menos; ya ni las finanzas ni los listados de afiliación controlan, la todopoderosa Unidad de Afiliación y Recaudación (UAR), que se gestiona desde Olimpo, es la que lo gestiona todo. Cualquier disensión con la dirección será resuelta a través del bloqueo económico primero y de la intervención política después. Las potestades estatales otorgadas por los estatutos al CPF de IU son ilimitadas a estos efectos".

Es obvio que el zeitgeist (el espíritu de los tiempos) va en un sentido determinado en Catalunya, pero en ese ámbito, en ese debate nosotros no hacemos más que perder el tiempo si en el mismo nos enfangamos en luchas entre nosotros. Lo nuestro es otra cosa si queremos que el federalismo pinte algo. De no ser así, tanto con el seguidismo de las fuerzas soberanistas como con el no seguidismo llegaremos al mismo sitio, esto es, a ninguna parte.

Si creemos en el federalismo o en el confederalismo hemos de intentar hacerlo posible, en esto hemos de poner todos nuestros esfuerzos. Lo primero es preguntarnos ¿por qué no es posible conformar un estado federal? ¿Por qué cada día más fuerzas políticas en las nacionalidades históricas apuestan por la independencia? ¿Por qué los ciudadanos las apoyan cada día con más convicción?

La respuesta es sencilla. No existe una fuerza política de ámbito estatal con un programa federal creíble. La vieja izquierda tradicional (PSOE e IU-PCE) está derrotada. Ya no nos sirve. Y su programa federal no se percibe como cierto, es un programa de cara a la galería. Mientras no seamos conscientes de esto daremos palos de ciego. Mientras no nos pongamos a construir una fuerza política estatal de nuevo tipo, agrupando en ella en lugar destacado a las izquierdas federales de las nacionalidades históricas, no avanzaremos. Izquierda Unida no es esto. IU-PCE genera recelos y alergia en las izquierdas federales de las nacionalidades históricas, no es su referente, pueden sumar con IU, pero no es su referente estatal, ni lo es a nivel europeo. A más tardemos en ponernos a ello más difícil será revertir la situación y más irrepresentativa será la opción que representamos.

Por mi parte sugeriría también hacer un análisis desde el punto de vista del ciudadano. Hay que analizar cómo percibe el ciudadano a las diferentes fuerzas políticas, qué espera de ellas. El análisis del ciudadano suele ser otro algo diferente al que realizan los especialistas cuando escudriñan los programas electorales de los partidos. Los ciudadanos no suelen leerse los programas, votan más por intuición. Hemos de adentrarnos en qué les dice a los ciudadanos su intuición. Qué perciben en la CUP para que las últimas encuestas digan que duplicaría su representación de celebrarse ahora elecciones, o en ERC o en C's. Pienso que los ciudadanos votan una forma nueva de ver y de hacer las cosas. Pienso que hay un comportamiento muy pragmático en la ciudadanía, sea esta más o menos de izquierdas. Ellos perciben que algunas fuerzas políticas, su mensaje, está agotado y optan, sencillamente, por los que representan algo nuevo que surge con fuerza y convencimiento. El barómetro del GESOP muestra claramente esto que digo. En él se dice lo siguiente:

"El primer barómetro político elaborado después de las elecciones del 25-N por el Gabinet d'Estudis Socials i Opinió Pública (GESOP) para EL PERIÓDICO revela que la inestabilidad creada debilita aún más a CiU, que con el 25,2% perdería entre 8 y 10 escaños, mientras que refuerza a ERC (16,9%), que obtendría 27-28 diputados. El PSC prosigue su caída según la encuesta de GESOP, que le concede 18-19 escaños (13,4%), seguido de cerca del PPC (11,5%), con 16-17 diputados. La encuesta sitúa a ICV-EUiA (10%) con 12-13 diputados, los mismos que le otorga a C's (9,8%). La CUP duplicaría escaños, pasando de los 3 actuales a 6-7 (5,2%)".

Javier Caso Iglesias | Analista Político y Activista Social.

Nota: Si es de su interés pueden ampliar la información sobre este barómetro político del GESOP en el siguiente enlace.-

sábado, 19 de enero de 2013

El papel de la vieja izquierda tradicional y conservadora (PSOE e IU-PCE) en la construcción de la alternativa política

Algunos compañeros de Construyendo La Izquierda (CLI) consideran que no podemos obviar a las izquierdas más convencionales en  la construcción de una alternativa política.

Por mi parte opino lo mismo, pienso que la vieja izquierda tradicional y conservadora (PSOE e IU-PCE) tiene que jugar un  papel destacado en la construcción de la nueva alternativa política y electoral que se ha de conformar. Algunos no estarán  muy de acuerdo con lo que voy a decir, pero es lo que sinceramente pienso.

Mi opinión es que la vieja izquierda tradicional y conservadora (PSOE e IU-PCE) sirve para centrar a las nuevas izquierdas  alternativas, así como a los espacios ciudadanos de ruptura, sirve para marcarles las dos orillas que no deben de cruzar si  desean ir por el lecho del río por el que fluye la corriente. Syriza ha encontrado un espacio político y electoral muy amplio  por el sencillo hecho de alejarse de los extremos. Como solía decir Siddharta Gautama "la virtud se haya en medio de dos  defectos". En Grecia un defecto es el PASOK neoliberal y el otro defecto el neostalinista Partido Comunista de Grecia (KKE).

En nuestro país ha sido Compromís la única fuerza política que ha entendido este paradigma y lo ha puesto en práctica con  magníficos resultados. En el momento presente otras fuerzas políticas de la izquierda alternativa y de los espacios  ciudadanos de ruptura siguen el ejemplo de Compromís y apuestan, cada día de una forma más decidida, por esa virtud política  que se haya en medio de dos defectos políticos: PSOE e IU-PCE.

Seguro que de cara a las elecciones europeas de 2014 contemos con un espacio electoral al que votar que se ubique entre los  dos defectos políticos que conforman la vieja izquierda tradicional y conservadora de este país, esto es, el neoliberal PSOE  y la neostalinista IU-PCE.

Aunque no lo parezca, el mantener vivos estos defectos políticos (PSOE e IU-PCE) para que sirvan de márgen a las nuevas  izquierdas alternativas es muy importante. La memoria suele ser muy olvidadiza y descuidada. El ser humano es el único animal  que tropieza dos veces en la misma piedra. Aquello que no tiene constantemente presente lo suele volver a omitir.

Pero para que sean útiles como balizas de señalización del peligro, han de ubicarse en el extremo de la zona no transitable.  Por elemental lógica no podemos incluirlas dentro del área que está fuera de peligro, pues sería un error que traería  aparejadas graves consecuencias.

Si alguien quiere salir a flote no se ataría un lastre a la cintura, pues tendría su mismo fin. A Jean-Luc Mélenchon en  Francia y a Oskar Lafontaine en Alemania les está ocurriendo algo de esto. Han sabido con inteligencia distanciarse de los  neoliberales partidos "socialistas" de sus respectivos países, pero han caído en las garras de los stalinistas partidos  "comunistas". Mientras continúen por esa línea poco lejos llegarán. Nunca serán capaces de conformar una alternativa solvente  como lo es Syriza en Grecia.

Como decía a mis compañeros de CLI, las respuestas están todas dadas. Lo que no puede ser no puede ser y, además, es  imposible. Es cuestión de metodología, de paradigma, de modelo de relación.

El modelo de la vieja izquierda tradicional y conservadora, que es el mismo de aquellos para los que esta sigue siendo un  referente, es piramidal. En él unos definen los objetivos y otros laboran por su consecución. El tipo de partido necesario  para esto es jerárquico, centralista y altamente estatutario como el PSOE o IU-PCE.

El modelo de la izquierda alternativa es horizontal, los que definen los objetivos y quienes laboran por su consecución son  los mismos. La comunicación constantemente fluye en un proceso de cooperación y ayuda mutua.

El ubicarse en uno o en otro modelo no depende de los demás, es decisión de uno mismo.

Si uno diseña lo que se debe de hacer y luego espera a que otros lo hagan está en el primer modelo, el de la vieja izquierda  tradicional y conservadora.

Si uno piensa con su propia cabeza lo que se debe de hacer, mira a su alrededor quién está haciendo eso mismo que él piensa y  se pone manos a la obra a hacer realidad ese pensamiento junto a todos lo que esas mismas ideas desarrollan en la práctica,  pues está en el segundo modelo, el de la izquierda alternativa.

En la izquierda alternativa la comunicación es fluida, además de horizontal consecuencia del propio modelo; es una  comunicación que surge con naturalidad sin forzarla, e incluso sin pedirla. Pues todos reman en el mismo sentido, decidido  esto de forma personal y consciente.

En la vieja izquierda tradicional y conservadora la comunicación es poco fluida, hay que forzarla a golpe de estatutos; es de  arriba a abajo en relación al diseño de lo que dicen que se debe de hacer por parte de los que piensan y de abajo a arriba en  relación a los resultados que van cosechando los que hacen.

En el momento actual, y consecuencia de ese desarrollo incesante de las fuerzas productivas que trastoca constantemente las  relaciones sociales y de producción, se está produciendo un cambio sin precedentes. Vivimos en un modelo de transición.

Ahora si que hay muestras de la decadencia de la vieja izquierda tradicional y conservadora. Ahora si que hay muestras de que  a nivel estatal surge con fuerza la necesidad de que la izquierda alternativa conforme su referente propio a nivel de todo el  estado.

Las elecciones son también parte de la superestructura del sistema, en ellas se muestra el movimiento de las capas  tectónicas, las correlaciones de clase así como la situación de los paradigmas dentro de las mismas clases.

Como digo, el momento actual es de transición. Se están dando cambios en el paradigma. Se está decidiendo el cambio de un  paradigma por otro. Estamos cambiando de paradigma por necesidad. El que teníamos las clases populares, el paradigma  PSOE-IU-PCE, no nos ha servido como escudo ni como lanza ante la ofensiva de la derecha. Este paradigma de la vieja izquierda  tradicional y conservadora nos ha llevado a la derrota.

Necesitamos, en el momento presente, uno que nos sea eficaz, como clase, en esta lucha de clases en la que nos encontramos  entre el capital y el trabajo. Necesitamos con urgencia una nueva armadura con la que poder acometer las batallas que quedan  por librar y salir victoriosos.

La elección del paradigma, de la metodología, del modelo no es una cuestión de marca; lo que las clases populares probamos es  su consistencia y eficacia para esa lucha que nos ha de llevar a la victoria. El paradigma de la vieja izquierda tradicional  y conservadora no nos sirve (por mucha marca que tenga), ha sido derrotado y desguazado. No podemos confeccionar unos harapos  con el resto de su naufragio, eso nos llevaría a nuevas derrotas. Necesitamos las herramientas nuevas de la emergente  izquierda alternativa y su innovadora metodología de organización. Solo así venceremos.

Este momento histórico no es tampoco el de influir (el carrillismo murió con Carrillo), es el de fluir. Quién no tenga  capacidad para fluir, para implicarse desde la horizontalidad, no resultará otra cosa más que un estorbo en el camino.

Todo este análisis de la realidad que os doy a conocer lo he aprendido siguiendo la magnífica máxima de Galileo Galilei, esa  que dice lo siguiente: "Nunca me he encontrado con alguien tan ignorante de quien no pudiese aprender algo".

Por mi parte reconozco que una gran parte de todo lo que se me lo ha enseñado la vieja izquierda tradicional y conservadora.  Como dije en un artículo de opinión que me publicó Crónica Popular, la vieja izquierda tradicional y conservadora me ha  enseñado cómo NO se deben de hacer las cosas. Muy agradecido estoy por ello.

Javier Caso Iglesias | Analista Político y Activista Social

lunes, 14 de enero de 2013

Apuntes sobre el barómetro electoral de enero 2013 de Metroscopia y las elecciones europeas

Algunas fuerzas políticas se han puesto eufóricas al conocer los datos del último sondeo electoral de Metroscopia para El País. Una de ellas es IU-PCE que, ni corta ni perezosa, se ha puesto a tirar cohetes sin pararse a reflexionar en la letra pequeña del citado barómetro electoral.

Si analizamos la ficha técnica pormenorizadamente evitaremos efectos ópticos distorsionadores y nos podremos dar cuenta que, a los encuestados, solo se les ha preguntado directamente por cuatro opciones políticas (PP, PSOE, IU y UPD).

Por otra parte la cocina de la encuesta trabaja en el supuesto de una participación de entre un 60% y un 62%, es decir, entre 10 y 12 puntos por debajo de la de noviembre de 2011. O sea, que con los mismos votos se conseguiría una muy superior representación.

Además, en la ficha técnica del sondeo se nos dice literalmente que "la estimación del resultado electoral es consecuencia de la aplicación de una serie de técnicas correctoras a la intención directa de voto obtenida en el sondeo"; lo que en resumen quiere decir que el barómetro se ha cocinado en el interés de hacerlo decir lo que el medio que lo publica piensa.

Es obvia y lógica, en función a los intereses empresariales que defiende, la apuesta del periódico El País, así como del Grupo Prisa, por mantener intacto el espacio de la izquierda conservadora y tradicional que encarnan el PSOE e IU-PCE. Mientras esto siga siendo así ni la decadente monarquía ni este modelo de sistema generador de austericidio serán puestos en cuestión.

Menos mal que nos queda Compromís.

Como nos decía ayer la prensa, los 10.000 militantes de la formación y las favorables expectativas que le otorgan las encuestas serán las palancas sobre las que Compromís afrontará su propósito de "liderar una candidatura de ámbito estatal a las elecciones europeas de 2014".

La reciente celebración de un acto de Compromís en Madrid tenía el objetivo de abrir vías en esa dirección. Según Morera, "el reto europeo es sustantivo para Compromís", ya que pretende buscar en ese ámbito resonancia para construir "una alternativa en positivo" a las políticas de recortes y de "austericido" que se están aplicando.

"Estamos dispuestos a trabajar con más gente por una alternativa basada en las ideas de rescatar a las personas, de denunciar la deuda ilegítima, de reivindicar una Europa para los ciudadanos y de apostar por la economía del bien común", señala el dirigente de Compromís. Morera confiesa que su formación mantiene conversaciones con otras organizaciones y que ambiciona llegar a constituir una candidatura para el Parlamento Europeo que sea capaz de aspirar a un millón de votos en el conjunto del Estado español.

Esa aspiración enlaza con la de que la nueva estructura de Compromís, hecha "de abajo arriba", sea "un instrumento eficaz" en la construcción de una "alternativa política y social" al PP.

Javier Caso Iglesias | Analista Político y Activista Social

sábado, 12 de enero de 2013

La apuesta de Jean-Luc Mélenchon, co-presidente del Parti de Gauche, en favor de la Syriza en Francia

El periodista Mathieu Deslandes ha realizado a Jean-Luc Mélenchon, co-presidente del Parti de Gauche francés, una entrevista muy interesante que está circulando de forma activa por la red.

Se trata de una entrevista muy clarificadora, pues desde la primera respuesta que ofrece Jean-Luc Mélenchon deja clara su apuesta, sin complejos, por cambiar de forma sustancial la realidad de su país sumando con otros espacios políticos progresistas al objeto de hacerlo posible.

Este es el hecho que marca la diferencia entre los que caminan hacia la conformación de Syrizas a nivel europeo, como Jean-Luc Mélenchon, y los zorrocotrocos (dícese de aquellas personas con pocas luces para razonar) de la actual dirección de IU-PCE.

Mientras el Parti de Gauche francés de Jean-Luc Mélenchon trabaja por cooperar con otras expresiones de la izquierda de su país, así como con los espacios ciudadanos de ruptura; en nuestro país la actual IU-PCE se especializa en competir e intentar amordazar cualquier expresión que no sea la propia.

Tanto Alexis Tsipras, de Syriza, como Jean-Luc Mélenchon, del Parti de Gauche francés, son personas que saben convivir perfectamente con la diversidad; la diversidad no los acompleja ni anula sus proyectos políticos, más bien al contrario, les da vitalidad, energía e impulso a los mismos. Son personas que constantemente están llamando a la cooperación política y ello posibilita la unidad de la diversidad de las fuerzas progresistas.

Frente a ello está la práctica, bastante torpe intelectualmente, de los zorrocotrocos de la actual dirección de IU-PCE; zorrocotrocos especialistas en la cultura de la poda, cultura cuyo objetivo es la unidad dentro de la uniformidad; cultura totalmente homologable en sus hechos y consecuencias a la que practica en Grecia el neoestalinista Partido Comunista (KKE).

Como decía ayer a mis compañeros/as y amigos/as de CLI, o en este país empezamos a saber analizar la realidad de forma objetiva y llamando a las cosas por su nombre o poco lejos se llegará. No podemos ocultar que IU-PCE es una organización zorrocotroca con una estrategia muy torpe que la llevará al abismo. Igual que no podemos ocultar el grave daño que se hace a las clases populares de este país el hecho de que los espacios ciudadanos de ruptura y la izquierda alternativa, que no se siente representada ni integrada por la izquierda tradicional que encarnan PSOE e IU-PCE, no sume junta a nivel estatal.

Por nuestra parte hemos de hacer todo lo posible para desvelar estas realidades al objeto de que evolucionen y cambien en el sentido que las experiencias de la Syriza de Alexis Tsipras y el Parti de Gauche de Jean-Luc Mélenchon apuntan.

Para ello lo mejor es el ejemplo, ejemplo que señalábamos al principio de esta reflexión, esto es, la respuesta de Jean-Luc Mélenchon a la pregunta del periodista Mathieu Deslandes; es la siguiente:

¿Piensa usted que puede construir una mayoría alternativa con los ecologistas y una parte de los socialistas. ¿En qué momento podría ser eso una alianza electoral? ¿Para las municipales de 2014?

Somos triunfadores. No vamos a esperar a 2017 diciéndole a la gente: "Mientras tanto, podéis reventar". Así que hace falta batirse todos los días para abrir camino a una alternativa. Hay una mayoría de izquierda en la Asamblea: yo propongo que cambie de centro de gravedad. Estoy listo para ser primer ministro, pero me puedo imaginar que no lo sea. Fórmese una coalición de socialistas, ecologistas y representantes electos del Front de Gauche, en una línea de ruptura evidentemente con la lógica capitalista y productivista. Es posible. A nosotros nos toca demostrar que somos socios fiables, ideológicamente estables, no dogmáticos.

Javier Caso Iglesias | Analista Político y Activista Social


jueves, 10 de enero de 2013

¿En qué condiciones aceptarías participar en un Frente de Izquierdas?

Ayer un compañero de la Comisión Promotora de CLI me preguntaba ¿En qué condiciones aceptarías participar en un Frente de Izquierdas?

Todos/as sabéis que me inclino más por conformar a nivel estatal una Syriza que un Frente de Izquierdas, en varios artículos publicados en mi blog he dejado constancia fehaciente de ello. No obstante, conocedor como soy de que los procesos de desarrollo son progresivos, entiendo que toda Syriza comienza a través de un Frente de Izquierdas; incluso la Coalición Compromís, que es un referente para muchos entre los que me incluyo, comenzó como un Frente de Izquierdas en la que incluía a IU. La misma realidad la representa AGE en Galicia.

Dicho esto respondo a la pregunta que me formulaba el compañero de la Comisión Promotora de CLI, esto es, ¿En qué condiciones aceptarías participar en un Frente de Izquierdas?

Pienso que la única condición aceptable es la relativa a la conformación, como realidad independiente, articulada y estructurada, de la izquierda alternativa a nivel federal.

Es obvio que si queremos sumar con la izquierda tradicional y/o conservadora que encarnan PSOE y IU-PCE, bien preelectoralmente o postelectoralmente, la izquierda alternativa y los espacios ciudadanos de ruptura han de organizar y gestionar un espacio que les sea propio, han de ser capaces de conformar una cooperativa política propia, e independiente de la izquierda conservadora, que nos agrupe dotándolos de una voz y de una estrategia común.

Hace unos día trasladaba a las organizaciones que ocupan este espacio político la necesidad de dotarnos de un plan de trabajo en el que establezcamos una estrategia concreta, coordinada y común sobre la base de la idea de un Espacio Abierto, de una Cooperativa Política, es decir, una estructura común capaz de producir significado y de transmitir sentido político y tomar decisiones estratégicas. Como afirma Daniel Cohn-Bendit, una organización polinizadora, que aglutine las ideas y las transporte y fecunde con ellas otras partes del cuerpo social. Una organización polinizadora propia de la izquierda alternativa y de los espacios de ruptura que apuestan de forma decidida por la insumisión con lo que hasta hoy ha sido una manera de gobernar.

Un Espacio Abierto de reflexión, coordinación y acción política. Un Espacio Abierto que nos permita, a las organizaciones políticas y personas que lo conformemos, trabajar y reunirnos con normalidad y naturalidad con otras fuerzas políticas con las que mantenemos muchas similitudes, esto es: Compromís, con ICV, con CHA, con Anova, con PSM-IV, con Equo, con Primavera Andaluza, también con IU. Espacio Abierto a organizaciones y personas, de reflexión/coordinación/acción que labore en favor de la conformación de un Frente de Izquierdas, de un Frente Amplio Ciudadano y Popular.

Solo un plan de trabajo perfilado en este sentido, solo una hoja de ruta que incluya este objetivo, podrá diseñar una gran coalición que agrupe sin exclusiones a todas las fuerzas de izquierda.

De un tiempo a esta parte algunas organizaciones políticas de la izquierda alternativa y de los espacios ciudadanos de ruptura venimos laborando en este sentido con entera normalidad, es hora de que a este proyecto, a esta Cooperativa Política, a este Espacio Abierto se una más y más organizaciones que nos acompañen en el camino.

Como nos recomiendan los compañeros de Paralelo 36, seamos coadyuvantes para conectar. Es obvio que no es fácil porque el desarrollismo ha inoculado el virus de la competencia, la desconfianza, el individualismo y el mercantilismo en la política. Pero la cooperación política tiene como principal requisito cambiar la forma de entender la política y las relaciones políticas, sobre la base de la confianza y la generosidad.

Despegamos hacia el cambio. Quien quiera que se una.

Javier Caso Iglesias | Analista Político y Activista Social


miércoles, 9 de enero de 2013

Mientras las Syrizas triunfan, los Frentes de Izquierdas están fracasando en toda Europa

Le decía ayer a mis compañeros/as y amigos/as de CLI, a raíz de la publicación de un artículo mío en el diario digital Crónica Popular (http://goo.gl/dRkYf), que hemos de tener en cuenta que no es lo mismo una Syriza que un Frente de Izquierdas.

La primera (Syriza) alcanza representaciones políticas del 30% del electorado, la segunda (el Frente de Izquierdas) está estancado, en toda Europa, en representaciones electorales que no superan el 10%. Las últimas encuestas publicadas en Alemania reflejan que Die Linke (La Izquierda) baja hasta el 6% su representación electoral.

¿A qué se debe esta realidad?

¿Será por rechazar la Syriza todo tipo de acuerdo con la izquierda tradicional representada en Grecia por el PASOK (socioliberales) y el KKE (comunistas)?

¿Sería conveniente crear en España un espacio político estatal, similar a la Syriza griega, al margen de la izquierda tradicional que representan fuerzas políticas como el socioliberal PSOE y la comunista IU-PCE?

Enric Morera, portavoz de Compromís en las Cortes Valencianas, lo dice alto y claro: "Compartimos la voluntad de organizar a las personas insumisas del sur de Europa en un espacio ciudadano de ruptura con todo esto que hasta hoy ha sido una manera de gobernar. Despegamos hacia el cambio. Quien quiera que se una".

Por mi parte pienso que el PSOE es una opción política pasokizada y su transformación en otra cosa es poco probable. A IU-PCE le pasa lo mismo. La izquierda tradicional no tiene capacidad de renovación ni de refundación. Teniendo esto en cuenta nos queda el tercer espacio. Lo podemos conformar de forma excluyente o integradora. Yo apuesto por lo segundo. El modelo de la Coalición Compromís es un buen punto de salida, pues agrupa a cuatro fuerzas políticas; también podemos seguir el ejemplo de la coalición de izquierdas en Baleares entre PSM, Iniciativa Verde, Entesa y MES. Este espacio puede abrirse mucho más y es por lo que hay que trabajar. Abrirse tanto en fuerzas políticas que lo compongan como en su ámbito territorial.

En relación a IU creo irrelevante que la opción hegemónica en su interior sea la de echarse en brazos del PSOE (Valderas-Willy) o quedarse pataleando en la oposición (Cayo-Centella), o lo que hacen en Extremadura que es facilitar un gobierno al PP. IU ya no nos sirve como instrumento político, ese es mi convencimiento pleno. IU no es ningún instrumento de transformación del sistema, igual que no lo es el PSOE. La izquierda tradicional, sus prácticas así lo evidencian, son aparatos de perpetuación de su casta política e institucional; casta con diferentes apellidos, pero casta al fin y al cabo, casta que no sabe ponerse al servicio de la ciudadanía y que, con este no saber suyo, beneficia exclusivamente a la perpetuación del sistema como así se evidencia desde los tiempos de la transición. Es una casta que va a por la cuota y el reparto del poder.

El PSOE neoliberal es el primer interesado en que la IU-PCE siga siendo la IU-PCE que todos conocemos (filocomunista). El PSOE pasokizado es el primer interesado en que no se constituya nada nuevo a su izquierda, desea perpetuar a una IU-PCE a la que utiliza como vaso comunicante de votos cuando su acción de gobierno lo desprestigia, votos que cuando es ubicado en la oposición el PSOE recupera con facilidad.

Además, con las actuales opciones de izquierda tradicional no se recuperarán nunca las grandes ciudades para las opciones progresistas. En el ámbito rural aún el discurso ideológico de esa izquierda tradicional vende y arrastra a votantes, más bien se trasvasan del PSOE a IU-PCE temporalmente hasta que el PSOE presente su próximo mirlo blanco. Pero en las ciudades ya se exigen hechos y no huecas palabras. Poco a poco en el ámbito rural irá aconteciendo de la misma manera que en el urbano, el electorado defraudado por esa izquierda tradicional, caracterizada por un discurso radical en las formas e inconsecuente en la práctica, se irá ubicando en la abstención.

Pienso que en Europa, más temprano que tarde, se empezará a debatir este tema, antes o después saldrá a la palestra, me refiero al relativo a las diferencias entre una Syriza y un Frente de Izquierda. Las últimas encuestas en Alemania indican que Die Linke vuelve a bajar. Por mi parte sigo insistiendo, no es lo mismo una Syriza que un Frente de Izquierdas. Un Frente de Izquierdas es simplemente un envoltorio nuevo a un producto caducado como lo son los Partidos Comunistas, un nuevo envoltorio para garantizar la cuota de poder de estos; Una Syriza excluye y rechaza este tipo de estrategias subsistencialistas de los Partidos Comunistas.

Como les digo a mis compañeros/as de CLI, por mi parte no pongo objeciones a nada, cada cual es libre de tomar su camino, pero hay caminos que no conducen a ninguna parte. Por mi parte asumo, acepto e incluso aliento a que quién así lo desee se equivoque las veces que entienda oportuno, pero yo ya no me voy a dejar engañar de nuevo por los IU-PCE ni por los PSOE.

Los Frentes de Izquierdas están fracasando en toda Europa, pues son, como digo, un envoltorio nuevo para las vieja ideas stalinistas de los PC. En Francia están lastrando a Mélenchon y en Alemania a Oskar Lafontaine. Incluir a los comunistas stalinistas en un frente es un error político enorme, lo mismo que meter a los socioliberales del PSOE. Esas herramientas políticas (PSOE e IU-PCE) están caducas y obsoletas para los nuevos tiempos. La ciudadanía recela de ellas y con razón.

Mi apuesta es clara y se caracteriza por trabajar en favor de la construcción de una Syriza al margen de la izquierda tradicional que encarnan tanto el PSOE socioliberal como la IU-PCE filocomunista, una Syriza que agrupe a toda la izquierda alternativa al margen del PSOE y de IU-PCE. En Grecia ahí ha estado la clave del éxito político y electoral. En España hemos de quedar fuera de la Syriza a las organizaciones políticas, así como a sus castas, que amnistiaron al franquismo (PSOE e IU-PCE).

Javier Caso Iglesias | Analista Político y Activista Social

domingo, 6 de enero de 2013

Las diferencias sustanciales entre Syriza y el Frente de Izquierdas

Todos sabemos que Rajoy anticipará las elecciones generales, o bien las hará coincidir con las europeas de 2014 o bien con  las autonómicas y municipales de 2015; por tanto hemos de estar preparados para esas fechas.

Lo fundamental para ello es contar con herramientas políticas y sociales capaces de garantizar este cambio de ciclo ante el  que nos encontramos. Como dijo Leonardo da Vinci "No estamos ante una época de cambios, sino ante un cambio de época".

Esto es lo fundamental que se debe de entender, pues al momento actual no le valen parches ni medias tintas. El momento  actual no es una época de cambios lampedusiana o gatopardiana. Ya no sirven esas alternativas basadas en el "algo tiene que  cambiar para que todo siga igual". Esto, como digo, no es una época de cambios en la que sirvan parches y medias tintas como  los que se vienen sucediendo desde el inicio de la muy sumisa y temerosa transición iniciada en 1975, sino un cambio de  época.

Diferentes analistas políticos y electorales así lo apuntan. La base en la que sustentan sus opiniones es científica.  Concienzudos estudios indican que existe un cambio radical de comportamiento entre generaciones, un hecho diferencial sin  precedentes que se aprecia en sus antagónicos comportamientos políticos y electorales. Un verdadero tsunami se está producido  en la forma de pensar y de dar solución a los problemas cotidianos que padecemos.

Este hecho diferencial está en la forma de aprehender las cosas de los hijos de las generaciones de los años 50 y 60. O sea,  de aquellas personas ahora tienen entre 18 y 40 años.

Ya no somos los que nacimos en los años 50 o 60 los que vamos a marcar el rumbo. Sino nuestros hijos. Ya no somos los hijos de la guerra y de la postguerra civil los que vamos a marcar el rumbo de este país como hasta ahora, sino nuestros hijos;  esto es, los hijos de las generaciones de los años 50 y 60. O sea, de aquellas personas entre 18 y 40 años fundamentalmente.

Sus herramientas políticas para producir cambios también son otras, las nuevas tecnologías han jugado un papel determinante  en ello.

Mientras que la generación de los hijos de la guerra y postguerra civil están con el matarile de los Frentes de Izquierda (en  España IU, en Portugal CDU en Francia FG, en Alemania Die Linke), los hijos de la generación de los años 60 apuesta más por  las herramientas políticas del tipo Syriza.

En Grecia Syriza se opone de una forma clara a todo lo viejo, de ahí su respaldo electoral. Lo viejo es la derecha, pero  también la izquierda tradicional representada por el neoliberal Partido Socialista de Grecia (PASOK) y el stalinista KKE  (Partido Comunista Griego).

El espacio electoral de Syriza es un espacio de decidida ruptura democrática con todo lo anterior, es un espacio que no suma  con lo viejo. Un espacio que no está ahí, exclusivamente, para derrotar a la derecha, está para derribar el sistema, con  vocación de mayoritario como mayoría es el pueblo; no es un espacio que esté ahí para sumar con nadie, está para ganar las  elecciones e imponer su política.

En el Estado español una Syriza tendría que configurarse con un posicionamiento estratégico perfectamente definido al margen  de aquellos partidos de la transición que amnistiaron al franquismo.

Como indican algunos sociólogos y analistas electorales, recogiendo el sentir de nuestras generaciones más jóvenes, se podría  afirmar:

1.- El juicio electoral ya está emitido por lo que respecta al PSOE, partido al que no se le considera de los nuestros. Pero tampoco son de los nuestros las castas políticas que se han generado en estos 38 años de transición, tantos como de dictadura; pues estos partidos de la transición que amnistiaron al franquismo tampoco son de los nuestros. Son partidos que no hicieron pedagogía democrática o de la sociedad civil durante este tiempo, que no hicieron nada realmente significativo por las personas, salvo participar del botín. Esta es la situación, de ruptura por parte de la generación mas joven, que es la primera que se interesa por el poder desde 1939.

2.- El asalto al sistema de representación es posible ahora, y la configuración de una nueva mayoría parlamentaria es el camino directo para el establecimiento de un orden nuevo. Cabría preguntarse ¿tenemos vocación de ser mayoritarios? porque el pueblo es mayoría; así sucedió con Syriza y así tiene que suceder en España en torno a nuevas candidaturas ciudadanas. Porque la voz de la ruptura de los mas jóvenes lo es de la mayoría social española, y de la griega y la portuguesa, y de la mayoría global. Esa ruptura es comprendida y compartida por la amplia mayoría social del planeta. Ahí no está IU, ni los Frentes de Izquierda, ni el PSOE ni nada de lo antiguo, está el espacio Syriza que es lo nuevo.

3.- Este espacio Syriza, este espacio de ruptura democrática es lo opuesto a la transición, es el pueblo el que presiona para el establecimiento de un orden nuevo, no son las élites las que lo establecen. Por tanto, lo que piensa Rubalcaba o Cayo Lara  no le interesa a nadie en el espacio de ruptura, es irrelevante. A nosotros, que apostamos por la ruptura democrática,  tampoco nos interesa. Pues la vieja izquierda es muy parecida a la jerarquía de la iglesia católica, algo que es un coñazo en todas sus manifestaciones.

4.- El espacio Syriza no hará aritmética electoral ni geometrías variables hasta que estén todos los votos metidos en las urnas; pues gobernar a remolque de los viejos partidos de la transición nos puede llevar a perderlo todo, de modo que habrá que tener más escaños que ellos.

La pelota está, ahora más que nunca, en nuestro tejado, hemos de elegir de una forma nítida entre lo nuevo y lo viejo, entre ser opción de gobierno o pataletas en una oposición marginal, o Syriza o Frente de Izquierdas, he aquí la cuestión; Ser o no ser, de eso se trata.

Javier Caso Iglesias | Analista Político y Activista Social


viernes, 4 de enero de 2013

Ante un posible anticipo de las elecciones generales, preparemos el nuevo referente estatal de izquierdas

Le acabo de decir a mis compañeros/as y amigos/as de la Coordinadora de Construyendo LA IZQUIERDA (CLI) que es positivo trabajar (cada uno según sus posibilidades) en los espacios de coordinación; sin que ello suponga dejar de atender a su propia cultura, tradición o familia política. Hacer esta tarea bien de forma presencial o virtual.

Decir que, por mi parte, apoyo incondicionalmente la actividad que está desarrollando Iniciativa Socialista de Izquierdas (ISI) en aras de agrupar al mayor número posible de socialistas de izquierdas que no se sienten representados ni por el PSOE ni por IU; también valoro la tarea que viene desarrollando la CLI, la PSI o la Coordinadora de Acción Socialista por conformar espacios de encuentro y acción con socialistas críticos del PSOE o de IU, así como con otros socialistas a los que la izquierda tradicional no integra.

Mi apuesta ya la conocéis, ayer la dejaba señalada de nuevo en mi blog.-
Encuestas electorales. Las fuerzas progresistas ganamos a las conservadoras en Baleares y en Valencia
(http://goo.gl/DFxKY)

Como en el artículo se dice, el hecho diferencial político que se aprecia entre las Islas Baleares y la Comunidad Valenciana en relación al resto del Estado (ese hecho diferencial que va a posibilitar gobiernos de izquierdas) está en la aparición en escena de un tercer espacio progresista, espacio progresista diferenciado de la izquierda tradicional que encarnan PSOE e IU y situado más allá de lo que representa IU y ubicado en lo que ha dejado de representar el PSOE.

Un espacio progresista nacido para cooperar, no para competir. Espacio progresista que es el único con capacidad para posibilitar gobiernos de izquierdas. Espacio progresista que en la Comunidad Valenciana encarna Compromís y en las Islas Baleares la coalición entre PSM-IniciativaVerds-Entesa. Espacio progresista con capacidad para representar a ese 15%-20% del electorado que en la actualidad nos encontramos huérfanos de referente político.

Esperemos que más temprano que tarde este tercer espacio progresista, a ubicarse entre el PSOE e IU, se constituya a nivel estatal; pues es necesario.

Más ahora que sabemos que Rajoy anticipará las elecciones generales, o bien las hace coincidir con las europeas de 2014 o bien con las autonómicas y municipales de 2015; por tanto hemos de estar preparados para esas fechas. Es obvio que, para ello, necesitamos un nuevo referente de izquierdas que sea capaz de ocupar el espacio electoral que ha dejado de representar el PSOE y, a la vez, sepa sumar con la izquierda tradicional para conformar gobiernos unitarios progresistas.

Como siempre digo estas son mis ideas que dejo a vuestro mejor criterio. Ideas que señalan que la Syriza española será más bien postelectoral y conformada por las tres culturas políticas en las que está y se está organizando la izquierda a nivel de Estado.

Javier Caso Iglesias | Analista Político y Activista Social


miércoles, 2 de enero de 2013

Encuestas electorales. Las fuerzas progresistas ganamos a las conservadoras en Baleares y en Valencia

En caso de celebrarse ahora elecciones autonómicas en las Islas Baleares el Partido Popular, liderado por José Ramón Bauzá, perdería la mayoría absoluta. Esta es la realidad que apunta el último sondeo electoral realizado hace escasos días por el Instituto Balear de Estudios Sociales (IBES).

Según el sondeo del IBES, hasta siete diputados perderían los conservadores del PP, pasando de los 35 escaños que alcanzaron en mayo de 2011 a solo 28, dos por debajo de la mayoría parlamentaria.

El estudio también señala el avance de la izquierda, sobre todo de la mano de PSM-IniciativaVerds-Entesa que lograrían 6 escaños con un 13% de intención de voto y de Esquerra Unida con 2 escaños con un 5% de intención de voto. Por su parte el PSOE conservaría la representación, repitiendo los mismos resultados de mayo 2011. Estos resultados, de mantenerse esta progresión al alza de las fuerzas progresistas, posibilitarán desplazar a los conservadores del PP del gobierno balear.

Una realidad similar se experimenta en la Comunidad Valenciana, pues, como se constata en diferentes encuestas, si las elecciones a Cortes Valencianas se celebrasen hoy el mapa electoral sufriría un auténtico tsunami. El desgaste del PP es tan grande que la izquierda tendría escaños suficientes para gobernar en coalición.

El PP perdería 13 de sus 55 escaños actuales (la mayoría absoluta está en 50) y el 15,1% de los votos. Ni siquiera la entrada de Unión Progreso y Democracia (UPyD), el partido de Rosa Díez, daría oportunidad al PP de gobernar en coalición.

Los grandes beneficiados de este tsunami político son Compromís y Esquerra Unida, que superan en más del doble sus resultados. Coalició Compromís obtendría el 13,6% de los votos y Esquerra Unida, recogería un 11,5% de los votos. Con estos porcentajes, ambas formaciones obtendrían 13 escaños cada una, que sumados a los 25 del PSPV permitirían formar una coalición de izquierdas (basada en 51 parlamentarios) para gobernar.

El hecho diferencial político que se aprecia entre las Islas Baleares y la Comunidad Valenciana en relación al resto del Estado (ese hecho diferencial que va a posibilitar gobiernos de izquierdas) está en la aparición en escena de un tercer espacio progresista, espacio progresista diferenciado de la izquierda tradicional que encarnan PSOE e IU y situado más allá de lo que representa IU y ubicado en lo que ha dejado de representar el PSOE.

Un espacio progresista nacido para cooperar, no para competir. Espacio progresista que es el único con capacidad para posibilitar gobiernos de izquierdas. Espacio progresista que en la Comunidad Valenciana encarna Compromís y en las Islas Baleares la coalición entre PSM-IniciativaVerds-Entesa. Espacio progresista con capacidad para representar a ese 15%-20% del electorado que en la actualidad nos encontramos huérfanos de referente político.

Esperemos que más temprano que tarde este tercer espacio progresista, a ubicarse entre el PSOE e IU, se constituya a nivel estatal; pues es necesario.

Javier Caso Iglesias | Analista Político y Activista Social