El 21 de septiembre de 2010 propuse, como así recogieron algunos medios de comunicación, escuchar la voz de la ciudadanía antes de configurar ninguna candidatura electoral; se trataba de una propuesta que realizaba de cara a las elecciones municipales que se celebraron el 22 de mayo de 2011.
En ese momento plantee configurar una verdadera candidatura por Plasencia que se realizara con una gran generosidad, dado que el PSOE de Plasencia -lo decía entonces y lo mantengo ahora más de dos años después- es una opción política amortizada consecuencia de su actual dirección que ha gobernado a espaldas de la ciudad y en contra de la mayoría de sus ciudadanos; y el PP sigue sin convencer y aferrado a sus fantasmas de su pasado; siendo en esas condiciones, la opción PP para la ciudad, incluso peor que la de un PSOE en estado de catalepsia.
También afirmaba que es este un momento adecuado para iniciar un proceso político que se caracterice por luchar infatigablemente por los intereses de Plasencia. Un nuevo proceso político, para esa Convergencia por Plasencia, que hemos de ser capaces de articular en la ciudad.
Para ello, ahí están las hemerotecas para corroborarlo, proponía una candidatura de consenso liderada por Mónica García Díaz (PREx-CREx), que incluyera a personas como María Victoria Domínguez (UPEX), Juan Carlos Herrero (PREx-CREx) y Victoriano Durán (PREx-CREx). Una lista en la que me incluía como número 6, pero con disponibilidad a aceptar por mi parte ir el número 7 en la misma si fuéramos capaces de incorporar a esta candidatura a Extremadura Unida; pues un gobierno Progresista-Regionalista es -decía en esos momentos y ahora sigo manteniendo- necesario y posible en Plasencia; pues si tanto nos quejamos de cuanto nos perjudica la Ley D'Hondt si vamos separados, pues agrupémonos y sumemos juntos.
Lo decía entonces, esto es, el 21 de septiembre de 2010 y lo mantengo ahora. Se hace necesario un gobierno progresista-regionalista en Plasencia, como así también hace falta en Extremadura; un gobierno alejado de las viejas partitocracias de la agotada transición, de esas partitocracias políticas cuyas delegaciones en Extremadura se organizan y se dirigen desde Madrid.
Es hora ya de articular un espacio abierto, plural y amable que integre y represente adecuadamente al conjunto de los ciudadanos extremeños que demandan una opción electoral que sepa unificar a todas las familias políticas que representan al regionalismo progresista. Un espacio abierto que incluya a PREx-CREx, a SIEx, a UPEx, a EU, a CEx y a cuantas organizaciones y personas pongan a los ciudadanos extremeños, a las empresas extremeñas y al futuro de Extremadura por encima de espurios intereses dictados desde Madrid.
Un espacio político y electoral que represente al regionalismo progresista que, como dicen los compañeros de PREx-CREx, pueda tomar en el futuro las riendas del gobierno de Extremadura.
Javier Caso Iglesias | Analista Político y Activista Social
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